La censura franquista en el cine de papel (2009)


He aquí catorce carteles e imágenes representativos del libro de Bienvenido Llopis dedicado a la censura cinematográfica en la época franquista (con esbozos de lo que vino después).
I.

II.III. IV.V. VI. VII. VIII. IX. X.XI. XII. XIII. XIV.
 

1 comentario:

Tyler Durden dijo...

Ayer pude estar junto a Jesús Franco en una exposición verdaderamente interesante sobre la serie B en España, pero dejaré todas estas cosas para una próxima entrada tras el puente. Prefiero hablar un poco del interesantísimo libro La censura franquista en el cine de papel (2009), de Bienvenido Llopis, porque ahora que parece haber vuelto la moda de la censura (recordemos las polémicas con el cartel de Diario de una ninfómana, la calificación X de Saw VI o la movida creada con A serbian film, tema que ya ha sido tratado en este blog), no estaría de más acordarnos de nuestros maestros: los censores franquistas.

Es curioso cómo el progresismo más mojigato y pueril acaba identificándose en ciertos aspectos con otras ideologías tan aparentementes opuestas... bueno, mejor dejar la política a un lado.

Gracias a la red (http://www.elpais.com/articulo/agenda/Cinefilos/insaciables/mitomanos/incorregibles/elpepigen/19850901elpepiage_8/Tes#) descubrí que más que escritor, Bienvenido es un vendedor de rastrillo especializado en carteles cinematográficos antiguos; y ante un libro como éste, eso no es una pega sino todo lo contrario, ya que contiene un material fabuloso. Seré un poco nostálgico, pero a mí el rollito de los carteles antiguos dibujados a mano me fascina (quizás porque de pequeño dibujé como un loco). Hace unos días vi a Zulueta en Iván Z, un documental sobre él, enseñando sus dibujos de carteles antiguos a la cámara y buf... ¡cuánta magia perdida!

El libro es curiosísimo, tanto que decidí capturar con el móvil varios carteles mientras lo leía en una biblioteca pública de mi ciudad, para después compartirlos en este blog.

Hablando un poco de las imágenes, las siete primeras son carteles censurados (el de la izquierda es siempre el original). Me encanta el apaño chapucero del VII o el error al escribir Ornella Muti del II. Pero los más increíbles son el V, con ese añadido militar friki en las cabezas y el III, ¡censurado porque el censor interpretó que el volcán parecía dos piernas abiertas con un coño chorreante en medio! Jajaja, increíble, que putos enfermos.

La VIII es sobre la censura en los títulos de las películas. En este caso, lo de una monja gitana no debió gustarles mucho, sobre todo porque "La monja gitana" es un fragmento de un poema de Lorca, así que optaron por La hermana alegría (y "curiosamente", desapareció la imagen de la monja entre barrotes).

La IX trata la censura a los actores, incluso extranjeros. En el cartel censurado se elimina el nombre de Robert Montgomery ya que éste dedicó unas palabras en favor a la República durante la Guerra.

La X y la XI son curiosísimas burlas a la censura que no necesitan ni ser comentadas por lo explícito (lo que sí merece la pena destacar es cómo la censura agudiza el ingenio de los censurados -piensen también en Hollywood y su "época Hays", con Hitchcock y compañía dando magistrales capeadas y vueltas de tuerca al código-).

La XII es un recordatorio de Marilyn y su escote jaja, y también de cómo hasta simples fotos promocionales eran censuradas.

Y para finalizar, la XIII y XIV forman parte de la postcensura: la época loca del destape, donde casi se llegaba a una contracensura igual de trasnochada (vean XIII, aunque es en cierto modo comprensible tras tantos años de represión expresiva) y el primer frontal de la historia del cine español; María José Cantudo abrió las piernas en La trastienda, y con ellas una puerta deliciosa que espero que nunca vuelva a cerrarse.